Diputados aprueban reforma al Poder Judicial tras maratónica sesión
En una maratónica sesión de más de 11 horas, la Cámara de Diputados aprobó en lo general la reforma al Poder Judicial. Con 359 votos a favor, 135 en contra y 0 abstenciones, los legisladores dieron luz verde a un dictamen que modifica, adiciona y deroga diversas disposiciones de la Constitución Política de México.
Aprobación en medio de tensiones y protestas
La sesión, realizada en una sede alterna en el gimnasio de la Unidad Deportiva Magdalena Mixhuca, fue resultado de la necesidad de evitar bloqueos en el edificio legislativo, llevados a cabo por trabajadores del Poder Judicial en huelga desde hace dos semanas. A pesar de las protestas, la reforma fue aprobada por la mayoría oficialista liderada por el partido Morena, siguiendo la propuesta del presidente saliente Andrés Manuel López Obrador.
Impacto de la reforma y oposición internacional
La propuesta ha generado tensiones no solo en el ámbito nacional sino también en el internacional, especialmente con Estados Unidos y Canadá, quienes han expresado su preocupación de que esta reforma podría «amenazar» la relación comercial dentro del T-MEC y representar un «riesgo» para la democracia en México.
¿Qué implica la reforma al Poder Judicial?
La reforma establece que jueces y magistrados, incluyendo a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), serán elegidos mediante voto directo en 2025. Los 11 ministros actuales de la SCJN serán destituidos y reemplazados por nueve nuevos miembros, quienes durarán en el cargo por 12 años, en lugar de los 15 actuales.
Además, se renovarán de manera gradual los magistrados de Circuito y Jueces de Distrito, comenzando con la mitad de los cargos en 2025 y completando el proceso en 2027. Las elecciones estarán a cargo del Instituto Nacional Electoral (INE), y los candidatos no podrán recibir financiamiento público ni privado, ni utilizar medios de comunicación para promocionarse.
Una de las novedades de la reforma es la creación de la figura de «jueces sin rostro», que protegerá la identidad de los juzgadores en casos relacionados con el crimen organizado.
Enfrentamiento entre el poder legislativo y judicial
El presidente López Obrador ha impulsado esta reforma argumentando que los jueces y ministros han favorecido la corrupción y a grupos criminales, con la Suprema Corte siendo el principal blanco de sus críticas. Legisladores oficialistas han defendido la reforma asegurando que se está construyendo un sistema de justicia que será «ejemplo en el mundo».
Oposición y próximos pasos
La oposición ha manifestado su rechazo a la reforma, argumentando que la elección de jueces politizará el Poder Judicial y debilitará la división de poderes en el país. A pesar de estos señalamientos, la mayoría oficialista en la Cámara de Diputados ha avanzado con el proceso, que ahora pasará al Senado para su discusión y eventual aprobación.
Ricardo Monreal, coordinador de los diputados de Morena, defendió la reforma señalando que el Poder Judicial ha invadido funciones del Congreso y ha bloqueado propuestas presidenciales clave. Por su parte, legisladores del PAN han cuestionado el costo de implementar las elecciones que la reforma establece y han denunciado la falta de atención a los manifestantes que piden diálogo.
¿Qué sigue para la reforma judicial?
Una vez aprobada en lo particular, la reforma será remitida al Senado, que ya se prepara para sesionar en una sede alterna si es necesario. Posteriormente, el decreto deberá ser ratificado por al menos 17 congresos estatales para convertirse en ley, al tratarse de una reforma constitucional.
