COP 28: Estados Unidos aumenta compromisos climáticos, mientras la producción de petróleo alcanza niveles récord
En el marco de la COP 28, la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, destacó el liderazgo de Estados Unidos en la lucha contra el cambio climático, subrayando las acciones tomadas desde la COP 26. Harris anunció más de 400,000 millones de dólares en subvenciones según la Ley de Reducción de la Inflación de 2022, generando un impulso significativo en inversiones hacia energías limpias.
Además, Harris comprometió 3,000 millones de dólares adicionales al Fondo Verde para el Clima, destinado a ayudar a los países en desarrollo en la lucha contra el calentamiento global. Estos anuncios se dan en medio del debate en la COP 28 sobre el papel continuado de los combustibles fósiles en la economía energética futura.
Estados Unidos, aunque ha experimentado un aumento en la inversión en energías limpias, se encuentra en la paradoja de ser el segundo mayor emisor de gases de efecto invernadero y, simultáneamente, el mayor productor mundial de petróleo y gas. Este escenario plantea una pregunta clave en la conferencia: ¿puede la respuesta al cambio climático permitir el uso continuado de combustibles fósiles?
En un esfuerzo por abordar la dualidad, Emiratos Árabes Unidos, anfitrión de la COP 28, presentó compromisos de 50 empresas energéticas para reducir las emisiones de metano a cero para 2030 y eliminar todas las emisiones de efecto invernadero para 2050. Sin embargo, estas promesas generan escepticismo, y los expertos enfatizan la necesidad de pasar de las promesas a la regulación con respaldo gubernamental.
Compromisos Internacionales y Desafíos Pendientes
En la COP 28, 56 países, incluido Estados Unidos, se comprometieron a acelerar la descarbonización en sectores clave como energía, transporte, acero, hidrógeno y agricultura para 2030. Este movimiento busca impulsar sistemas energéticos más respetuosos con el clima en todo el mundo.
Iniciativa Científica para Desvelar Secretos de la Cuenca del Río Congo
Científicos en la COP 28 lanzaron el «Panel Científico para la Cuenca del Congo,» una coalición respaldada por la ONU que busca corregir la falta histórica de información sobre la cuenca y su selva tropical, la segunda más grande del mundo. La iniciativa, modelada tras el Grupo Científico para la Amazonia, tiene como objetivo ofrecer la evaluación científica más detallada sobre la cuenca del Congo para el 2025.
La COP 28 evidencia tanto los avances como los desafíos en la lucha contra el cambio climático, con compromisos internacionales y acciones nacionales que buscan encontrar un equilibrio entre la transición hacia energías limpias y la realidad de la dependencia actual de los combustibles fósiles.